conocida como la “Catedral del Norte” tiene 46 metros de altura total y 23 los campanarios laterales
VILLA TULUMBA: Iglesia del Rosario
El lusitano Antonio Ataide, hacia el 1700 mandó construir una capilla
Norte Redacción Enamorate de CórdobaEl lusitano Antonio Ataide, hacia el 1700 mandó construir una capilla bajo la advocación de Nuestra Señora del Rosario. En 1749, por disposición del Obispo del Tucumán Don Pedro Miguel de Argandoña, la capilla fue erigida en sede parroquial y unos treinta años después, en torno de ella había 13 casas y 111 habitantes , según el censo de 1778/9.
Contigua a la vieja capilla el presbítero López de Arcante, en 1878, ordena levantar un nuevo templo, lo que acentuará el deterioro del anterior. El presbítero franciscano Andrés García Colmena logró llevar a cabo la obra. La piedra fundamental fue colocada el 15 de febrero de 1881 y bendecida por el catamarqueño Fray Mamerto Esquiú y Medina (1826-1883) Obispo de Córdoba y Monseñor Uladislao Castellano hizo la consagración el 1 de febrero de 1894.
La nueva iglesia es de líneas relativamente modernas en estilo románico. Se accede al pórtico cerrado por una puerta de hierro de dos hojas con dintel en arco de medio punto.
La imagen más visitada del templo es Jesús Crucificado, articulado, con cabeza de curiosos rasgos y factura rústica, que data de 1799, se encuentra en la antesacristía y es usado en Semana Santa.
Villa de Tulumba es uno de los pueblos más antiguos de la Provincia de Córdoba y tiene sus orígenes en antiguas estancias concedidas como merced a los primeros conquistadores españoles
Este poblado posee una ambientación especial, que permite al turista retroceder en el tiempo y ubicarse a mediados del siglo XIX. Sus calles empedradas, sus farolas antiguas y las añejas construcciones, forman parte de una decoración especialmente pensada para recuperar detalles del pasado colonial.
La imagen más visitada del templo es Jesús Crucificado, articulado, con cabeza de curiosos rasgos y factura rústica, que data de 1799, se encuentra en la antesacristía y es usado en Semana Santa.
Villa Tulumba también tiene un caso histórico: las Cuatro Esquinas es uno de los rincones por donde pasan todos los días la mayoría de sus habitantes y que sirvió de inspiración para las obras de múltiples artistas. Uno de los datos más interesantes es que si se camina por la Calle Real se puede encontrar la casa de la familia Reynafé, una de las más importantes del país. Allí se ideó la masacre de Barranca Yaco, que terminó con el asesinato del general Facundo Quiroga en 1835.
La familia Giménez hace unos años armó el proyecto de construir en el lugar un emprendimiento turístico,
TOTORALEJOS: Un pueblo con un solo habitante lleno de fantasmas.
Quizás Totoralejos no tiene fantasmas, pero usted se anima a visitarlo en una oscura noche de invierno.
San Pedro Viejo, recibe huéspedes y visitantes. Algunos llegan hasta acá (a minutos de San Pedro Norte, en Córdoba) atraídos por la capilla del siglo XVI que se ve desde la ruta; otros por la posta que integra el Camino Real
Con más de 400 años, el corredor del norte provincial “Camino Real” se trata de un itinerario cultural de 176 kilómetros –partiendo de la localidad de Colonia Caroya y llegando hasta el límite interprovincial con Santiago del Estero– que reúne 17 postas y sitios de gran valor histórico, natural y cultural.
SAN PEDRO VIEJO: Una de las Capillas más antiguas de la Provincia
En el testamento de doña Jacoba Martel de los Ríos, firmado el 26 de julio de 1699 en la Estancia San Miguel, por primera vez se menciona la existencia de la Capilla de San Pedro.
Sobre un camino de tierra muy famoso a nivel histórico, ya que por allí pasaba el Camino Real al Alto Perú en épocas del Virreinato del Río de la Plata
Como casi todos los poblados del norte de la Provincia de Córdoba, Totoral tiene huellas de los aborígenes
Es importante, para llegar hasta este punto, asegurarse de tener suficiente combustible y revisar las condiciones del vehículo
Fue construido por Tristán Vivas alrededor de 1870
Ya no quedaba más leña en el monte y muchos hacheros se habían marchado por la escasez de trabajo.
El lusitano Antonio Ataide, hacia el 1700 mandó construir una capilla bajo la advocación de Nuestra Señora del Rosario.