
PANAHOLMA: Monumento a la India Panaholma
Cuenta la leyenda del río Panaholma, que había una princesa llamada India Panaholma quien fue prometida en matrimonio al hijo del emperador inca Viracocha.
Si bien hay menciones a hechos anteriores a 1750 (sepultura circa 1727 del Padre Salvatierra en la capilla) se debe asumir a esta fecha como la primera donde se encuentra la referencia
Norte - La Calera- Saldán- Va Allende- MendiolazaA fines del siglo XVI, la geografía donde hoy se emplaza La Calera fue recibida por Blas de Peralta como legado del Gobernador Hernando de Lerma premiando de este modo sus logros de conquista.
Esas sendas fueron dibujadas por los españoles para iniciar los yacimientos de donde transportarían la piedra caliza de la zona con rumbo a darle forma a la recién nacida Córdoba.
A principio del siglo XVII, la iglesia hizo también ocupación del sitio con hornos de cal propios. Su producción se destinaba a distintos emprendimientos de la Compañía de Jesús como el caso de la construcción del Colegio Mayor.
Si bien hay menciones a hechos anteriores a 1750 (sepultura circa 1727 del Padre Salvatierra en la capilla) se debe asumir a esta fecha como la primera donde se encuentra la referencia más clara en relación al propietario y al detalle de sus bienes que incluían lo que hoy conocemos como Capilla Vieja o Capilla del Rosario de La Calera.
Cuenta la leyenda del río Panaholma, que había una princesa llamada India Panaholma quien fue prometida en matrimonio al hijo del emperador inca Viracocha.
Entre ollas de diversa profundidad (hasta los 7 metros de hondo), cascadas y un entorno arbolado
Geográficamente encontramos a Los Vallecitos al pie de la ladera oeste del cordón montañoso a una altitud de 1500 metros sobre el nivel del mar
Una atracción para toda la familia, equipada con la última tecnología en iluminación y efectos ópticos.
El camping Doña Layda es el lugar ideal para acampar o bien para turistas que van a pasar el día al paraje El Durazno de Calamuchita
Quizás estas “apariciones” sean sólo fruto de la imaginación de los automovilistas que cansados transitan la Ruta 35, quizás no haya fantasmas,
Quizás las extrañas apariciones en la zona de El Espinillal sean sólo imaginación de la gente… Quizás las “luces malas” no existan…